El mundo de la ganadería y su traducción

El sector de la ganadería y la exportación de alimentos ha multiplicado su actividad durante los últimos 30 años. Hoy en día, no es raro encontrar una pieza de carne que ha sido producida en un continente y envasada en otro, para ser finalmente vendida en un tercero.

Un país como Dinamarca, por ejemplo, sacrifica una media de 30 millones de cerdos al año. Parte de su carne viaja hasta China para volver al mismo país, lista para su venta.

 

¿Hasta qué punto juega la traducción un papel importante en el mundo de la ganadería y la exportación hoy en día?

La ganadería es una actividad económica que consiste en la cría de animales para obtener productos derivados como la carne, la leche o los huevos. Esta actividad, que se remonta al período neolítico, cuenta con unos niveles de especialización tan altos que a menudo se demandan traductores especializados en la misma. Éstos deben tener amplios conocimientos de zoología y estar al tanto también de las novedades técnicas del sector. Por otro lado, deben conocer también la situación legal que lo rodea.

 

La legislación: normas nacionales e internacionales

Las actividades relativas a la producción, los controles sanitarios y la exportación están sujetas a las normas de cada país. La Unión Europea estipula también una serie de normas para aquellos países miembros, lo que facilita la exportación e importación dentro de sus fronteras. Es importante también que los traductores estén al tanto de las reglas impuestas por otras organizaciones, como la OIE (Organización Mundial de la Salud Animal), que garantiza la seguridad sanitaria del comercio mundial gracias a la elaboración de reglas aplicables a la exportación de productos de origen animal.

 

Dominio de vocabulario especializado

Los traductores especializados en temas relacionados con la ganadería deben dominar vocabulario legal, técnico y científico. El dominio de este último ha de ser amplio, ya que hace referencia a controles de sanidad, características de los animales, sus propiedades nutritivas y un largo etcétera. A menudo, los traductores cuentan con sólidos conocimientos de biología, veterinaria o nutrición.